viernes, 2 de abril de 2010

Objetivo: El July

Mi sala de clases estaba en el patio principal, lo que era el antiguo laboratorio, en 4º medio del año '85 mi inmejorable posición estratégica fue en la ventana que daba a dicho patio, vista panorámica que me permitía observar las chicas que me gustaban, escuchar los comentarios del recreo de mujeres, controlar la entrada del profesor a la sala y lo mejor de todo, observar a la joyita del Cousiño, al temido Julio Díaz. Su vestimenta característica era en este orden :Primera y última semana del mes el pantalón de tela y jersey eran ambos de color verde, segunda semana, pantalón marrón y jersey verde, tercera semana, pantalon y jersey marrón. Detrás de su sonrisa sarcástica escondía una dentadura perfecta(ja!), con un ojo más chico que el otro, te observaba, sacaba su lápiz BIC de tapa azul y anotaba en su 'minilibreta' sin espiral; En solo dos segundos, luego de identificarte visualmente, con sus mocasines Etchepare, caminaba dos pasos hacia atrás (cual árbitro presto a sacar tarjeta roja) y anotaba con su letra, Verdana Bold tan característica: y en este orden : tu código de alumno, año de matrícula, nombre completo, apodo, edad, curso, dirección, nombre de los padres, cantidad de hermanos, detalle corporal, breve resúmen del delito que cometías, cuotas impagas, nombres de tus amigos, breve resúmen del castigo, tiempo estimado del castigo, consecuencias psicológicas al castigo aplicado, beneficios del castigo y posibles reincidencias. Nunca gritaba, su velocidad de desplazamiento por el patio era de 4,85 nudos dependiendo de la Dirección...del viento, asi como lo veías cruzar en dirección a la salida, a los 30 seg. bajaba desde el edificio de infantiles, rondas de 15 minutos su parada preferida era a un costado de la virgen del patio, se mimetizaba cual macetero, con ambas manos atrás, la derecha sujetaba la izquierda en la que sostenía el BIC azul bajo el dedo mayor y la minilibreta sin espiral entre los dedos índice y pulgar, solo saludaba adultos, a alumnos y alumnas solo los miraba con su risa de media boca. Finalizado el recreo de mujeres debían estar todas todas fuera del perímetro de observación de los hombres, ventanas cerradas, chicas fuera de los baños, etc. con el mismo timbre de entrada de la mujeres, 30 seg. después salen los hombres, Julio Díaz los observa, fija la vista en los que corren al baño, mira cotonas, cuellos abiertos, corbatas muy abajo, pelo sobre la oreja o sobre el cuello de la camisa, solo observa, suena el timbre de entrada y su destino inmediato es el baño de hombres, no entra, se para a un costado del portón de Av. Colón y espera que se corra el comentario que está el July afuera, entra al baño de mujeres que tenía entrada al Salón de actos y llega al pasillo del patio principal, hay solo un 4º medio, hay poco que cuidar, los demás cursos de hombres están por la tarde, la época crítica fueron los años '82,'83,'84, muchos hombres, muchas mujeres, su responsabilidad no soportaría otra Armida-Fernando's gate, un caso que solo los de esa generación conocieron. Hora de salida, 15 minutos después de las mujeres salen los hombres, su salida preferida es por calle Retamo, objetivo principal : parejas con corbata ploma, ¡¡Dios!! una pareja de la mano y a tres calles del Colegio, paso lijero 8 nudos dirección Independencia, entre dos autos salta a la acera y se detiene frente a los 'herederos de Sodoma y Gomorra', serio, muy serio, en cámara lenta 'dos pasos hacia atrás y levanta sus clavículas en dirección al cielo' posición para el lápiz BIC tapa azul y minilibreta sin espiral, al alumno lo ficha en dos segundos con los pocos datos detallados anteriormente y le impone seguir solo su camino dada la gravedad del delito, consciente de lo que le espera al otro dia. De la niña, coge los mismos datos y agrega, color del pintalabios, color de uñas, promedio del largo del Jumper azul, (este cálculo lo hacía Julio Díaz comparándolo con el largo del Jumper azul a la hora de entrada al colegio), pelo suelto o tamado, y lo más importante el GPPHDR (Grado de Percepción del PH a Distancia Relevante) esto es el nivel del perfume en la piel de la chica, ese diagnóstico era determinante si los padres de la alumna eran citados a declarar a Colón 2733, si el GPPHDR estaba bajo los límites permitidos solo se exponía a un tedioso trabajo de castellano promediable en sus notas finales. Julio Díaz Tapia, rayó la cancha, marcó las pautas y se propuso un programa de reeducación de la conducta para los alumnos fundadores del colegio de hombres, debían convivir ambos sexos sin verse, sin mirarse, sin conocerse entre ellos aunque fuesen familiares, las mujeres ya tenían su disciplina marcada por la formación católica que heredaban, pero los hombres (plan que él nunca apoyó) se debían educar con disciplina férrea, formarlos en escuadrones y no en filas tradicionales, obligarlos a mantener silencio bajo frio o calor, pelo corto, corbata arriba, zapatos lustrados, nunca las manos en los bolsillos, uñas cortas, vestón abrochado, dar el asiento en las micros, caminar rápido a casa y exponer lo menos posible la insignia en la calle, venir los sábados a instrucción donde marchabas con himnos militares y te hacian estar en silencio toda la mañana, tu castigo eran las flexiones de brazos en tandas de 10, 20 ó 30 dependiendo del grado, al escuadrón 0 se enviaba el contingente indisciplinado que no era capaz de guardar silencio en las formaciones o no cumplía las normas de vestimenta. Las formaciones se dividían en Posición A, B, C y D alternativa..., cada una con movimientos de escuadrones en determinadas partes del patio, en los comienzos estaban prohibidas las fiestas de recaudación de dinero de cursos entre hombres y mujeres, pero su mayor dolor de cabeza es que no podía evitar que las entradas se vendieran entre hombres y mujeres, hay testimonios de alumnos que han ocultado su identidad en los que confirman haber visto al July en los alrededores de las compañias de bomberos o en la YWCA tomando nota de todo hecho extraescolar que pudiera apreciar.Julio Díaz sentó una época, impuso una moda, marcó nuestras vidas en los años más maravillosos que recuerda siempre un ser humano, te hundió tus travesuras cuando pasas de niño a adolescente, te quitó el chicle cuando el globo se llevaba tus pulmones, te cortó el pelo cuando lo lograbas mover con el viento, partió tus muñecas haciendo flexiones de brazos, aumentó el tamaño de tu bejiga en las tediosas tardes de frio en el salón de actos, silenció futuros poetas cortando el correo de amor clandestino y plasmó su cara y su nombre en nuestras mentes como ningún otro pero gracias a él, hoy no tendríamos un motivo para conversar.

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